Valora este artículo
(7 votos)

 

El cuello siempre está a la vista, la ropa no suele ocultarlo por completo. Así que resultará una muestra omnipresente de muscularidad siempre que esté debidamente trabajado.

Pero, además de sus calidades estéticas, un cuello fuerte es también uno de los mejores mecanismos de protección contra el dolor de hombros y frente a las complicadísimas lesiones del cuello (que nos pueden apartar de los entrenamientos por largas temporadas). En los deportes de combate o deportes de contacto, además, la fuerza del cuello es clave para el rendimiento y la seguridad ayudando a prevenir las conmociones cerebrales.